Tener un gato en casa 🐈

🐱 ¡Hola! Soy tu nuevo gatito y me gustaría contarte algunas cosas…

¿Qué hacer cuando un gato llega a casa?

Cuando un gatito entra en tu hogar debes tener en cuenta algo importantísimo: la anticipación y la preparación.

Puede que no te haya dado tiempo a anticiparte, si estás leyendo estas palabras y haciéndote muchas preguntas… Pero, no desesperes… Estamos aquí para ayudarnos mutuamente.

Al menos, si sigues estas indicaciones podrás reajustar lo necesario para que el «aterrizaje» de tu nuevo amigo sea lo más agradable posible, para todos: para los miembros de la familia y, por supuesto, para el precioso nuevo miembro de la familia: el felino.

Si bien no es fácil ni sencillo, ponte en el lugar de tu nuevo amiguito/a… llega a un entorno desconocido…

– Llega a casa un nuevo gatito

Si es “la primera vez” que llega un gatito o una gatita a casa, como decía y, por experiencia, es extremadamente importante prepararse con anticipación. Ya habéis/has tomado la decisión de incorporar un nuevo miembro a la familia y es una idea inteligente porque habrás ganado un amigo/a para siempre que te hará la vida más feliz y, sin duda, diferente.

Si bien no es fácil ni sencillo, ponte en el lugar de tu nuevo amiguito/a… llega a un entorno desconocido, que sí, será su hogar, pero aún no lo es y él no lo sabe; ni siquiera puede intuirlo.

Analicemos algunas cuestiones necesarias sobre todo este tema. Todas ellas las analizaremos pormenorizadamente en artículos concretos, pero vayamos por partes. Adelante!!

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El tamaño del entorno y los (otros) amigos felinos o caninos: ¿son los adecuados?

Para comenzar, puedes hacerte esta serie de preguntas…

¿Es tu casa lo suficientemente grande para que todos los gatos tengan un territorio adecuado?

Si ya conviven varios gatos en el entorno familiar, considera lo siguiente: ¿alguno de los otros gatos padece alguna enfermedad crónica en la que el estrés adicional de un gato nuevo pueda causar mayores problemáticas?

¿Alguno de tus gatos ya está sufriendo problemas de comportamiento, como un marcado inadecuado o arañazos, cuando antes no lo hacía?

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Cualquiera de estas preguntas tienen un respuesta que hará, si su sentido es positivo o negativo, que todo transcurra con mayor o menor normalidad. Ahora, analicemos estas cuestiones con algo de detenimiento.

No habría que señalar que en una casa muy pequeña no sería conveniente que convivieran dos o más perros o gatos; o que si ya vemos venir algún inconveniente en el comportamiento de alguna de las mascotas convivientes, quizá sea mejor valorar la nueva situación. Esto que os digo, lo cuento por experiencia, aunque sean asuntos de sentido común, muchas veces no nos damos cuenta o no queremos hacerlo y nos puede más el deseo que entender con sinceridad la realidad.

Una vez que hayas considerado cuidadosamente todos los factores anteriores y estés listo para incorporar un nuevo miembro de la familia felina a la humana, las siguientes secciones te ayudarán a garantizar una transición e integración sin problemas con otros miembros de la familia y mascotas, si hubiere. Si no lo has hecho, aún puedes ofrecer un entorno seguro y cómodo para todos. Veamos cómo.

– Consejos generales e imprescindibles para llevar un gato nuevo a casa

Lo primero que deberás hacer es preparar una HABITACIÓN SEGURA. Sí, una habitación segura, o lo que para él/ella será su refugio, que debe tener (o contener) el silencio y la tranquilidad que necesita mientras se familiariza con los nuevos olores, aromas y sonidos que rodean su hogar, los ruidos que llegan desde la calle, del vecindario… Al menos durante los primeros días.

Esta sala o habitación puede ser de cualquier tamaño, pero a poder ser debe tener una puerta única que él conozca. A los felinos no les gustan las sorpresas y como decía aquella célebre obra teatral: «Casa con dos puertas difícil es de guardar».

Los gatos recién llegados al hogar suelen estar nerviosos y les gusta esconderse

En este punto, puedes consultar nuestra artículos sobre Consejos de seguridad y prevención para gatos para contar con más información útil.

✅ Otro consejo: Ofrece a tu gatito un lugar para esconderse. Los gatos nuevos suelen estar nerviosos y les gusta esconderse. Eso les ofrece seguridad, sin duda.

Las cajas de cartón o las sábanas estratégicamente dispuestas sobre las sillas o sillones son lugares ideales y estupendos para que tu gatito encuentre un lugar adecuado para agazaparse.

Si resulta que has adoptado un gato tímido, te recomendamos que retires los muebles grandes de la habitación, como camas y armarios o tocadores.

Recuerda algo importante que tendrás que tener en cuenta en el futuro: es mucho más fácil interactuar con un gato escondido en una caja que con un gato escondido debajo de una cama.

¿Aún no os conocéis tu gato y tú?

✅ ¡CONSEJO! Ayuda a tu nuevo gato a conocerte. Sitúa una prenda de vestir que contenga tu aroma en la habitación segura.

Equipa la habitación segura con comida específica para gatos, un cuenco con agua y un recipiente arena. Normalmente, no tardará demasiado en hacer sus ‘cositas’ allí.

Coloca la comida y el agua en un lado de la habitación y la caja de arena abierta (sin cerrar) en el lado opuesto.

Los gatos más tímidos o temerosos pueden no comer mucho durante las primeras 24 a 48 horas y pueden experimentar diarrea temporal causado por el  estrés que siente.

Si tu gato no ha comido en 48 horas, prueba con algunas golosinas especiales. No tienen porqué ser de las que venden en atractivos envoltorios. Quizá le atraiga más algo de rico atún o sabroso salmón. Si, pasadas esos dos primeros días el gatito no come deberías consultar a tu veterinario para que le haga un chequeo al felino y te aconseje qué es lo mejor que debes/puedes hacer. Normalmente, eso no ocurrirá porque el hambre es el hambre y puede a los nervios o a la sensación de inestabilidad en el camino a la adaptación al nuevo hogar.

Un juguete nuevo como nuevo entretenimiento

En esos primeros días estaría bien proporcionar a tu nuevo amigo un juguetito con el que pasar las horas con el mejor entretenimiento.

Una de las cosas que más les apasiona es el típico poste rascador (de al menos un metro de altura). Rascarse es un comportamiento natural y reconfortante para los gatos.

✔ También es importante que el poste rascador sea nuevo y no lo hayan utilizado otros gatos.

Tu nuevo amigo no debería estar expuesto por el estrés que le pueden causar los olores de otros gatos mientras se está adaptando a su nuevo entorno.

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✔ Si tu nuevo gato ya no es cachorro, es un adulto, puedes usar un producto comprado en la tienda especializada o en el veterinario que imite las feromonas naturales de los gatos para que le ayudes a sentirse en un espacio más cómodo. Este tipo de productos los podrás encontrar en forma de spray o difusor.

El día es muy largo y tu gatito necesitará entretenimiento. Una idea lógica es proporcionarle diferentes juguetes, incluso alternarlos a lo largo del día. Ya sabes, ratones de plástico o pelotas en esta primera habitación segura le harán el tiempo más llevadero cuando tú no estés cerca.

Nuestro nuevo amigo requiere atenciones y eso es tiempo

Una de las obligaciones de los primeros días en casa será pasar todo el tiempo posible con tu nuevo gato.

Al principio, es recomendable visitarlo con frecuencia durante períodos cortos de tiempo. Visitar puede significar interactuar directamente con el nuevo gato en forma de juego o caricias, o leer tranquilamente un libro o charlar por teléfono en el mismo espacio que tu nuevo compañero.

Ten en cuenta que un gato nervioso puede gruñir, silbar, mover la cola o echar las orejas hacia atrás. La mejor respuesta es hablar en voz baja y dejar al gato un tiempo a solas.

La transición más allá de la habitación segura

Cuando tú y tu nuevo gato hayáis establecido una relación de confianza, el gato estará listo para comenzar a explorar la casa. Asegúrate de comenzar este proceso cuando estés en casa para supervisar. Cierra la mayoría de las puertas para que el gato comience su orientación por etapas.

Demasiados espacios nuevos a la vez pueden resultar estresantes y atemorizantes. Si has adoptado un gato tímido, asegúrate de no dejarlo en el sótano o en zonas oscuras durante muchas semanas. La mayoría de los sótanos tienen muchos escondites, algunos inaccesibles para los humanos.

Recuerda, la integración en el resto de la casa depende de la personalidad de tu nuevo gato (así como de sus mascotas existentes, si las hubiera). A veces, el proceso de integración puede comenzar en solo dos o cuatro días; sin embargo, a veces es mejor esperar un par de semanas. Los gatos tímidos en particular pueden necesitar un período de integración más largo, como es lógico.

Cómo presentar a un gato a los otros gatos

No, no se trata de un trabalenguas, aunque lo parece. Voy a intentar detallar las fases o etapas en las que se produce el contacto entre gatos y cómo se sucede. Es de vital importancia observar el desarrollo de los acontecimientos con especial interés…

✔ Primera Etapa – El gato huele a gato. Se huelen

Las presentaciones exitosas toman tiempo.

Lo normal es que tengas grandes deseos de presentar a tu nuevo gato al resto de gatos, si ya tienes, y a toda la familia, incluso a todo el vecindario 😀

Bien, quizá no sea una gran idea.

Estamos tratando con felinos y hay que andar con cautela. Una ‘presentación’ apresurada del nuevo gato a los ya residentes podría dañar la nueva relación de forma irreversible y suscitar malas sensaciones como miedo, enojo, incertidumbre…

Lo más aconsejable es dejar que la naturaleza siga su curso; que los gatos huelan la situación. Permite que el «olor» sea la primera presentación mientras los gatos se olfatean entre detrás de la puerta de la «habitación segura».

Pasados unos días, comienza a cambiar la ropa de cama entre el gato nuevo y el ya residente todos los días. Esto ayuda a familiarizar a los gatos con los aromas de los demás.

✔ Segunda Etapa – El gato sigue oliendo al otro gato

Deja que continúe olfateando. Si no hay signos marcados de agresión por parte de los gatos, como silbidos y gruñidos, el siguiente paso es acomodar a tu gato residente a una habitación y dejar que el nuevo gato explore ‘su casa’ durante un par de horas cada día; y así durante varios días.

✔ Tercera Etapa – El gato ve al otro gato

Organice una reunión de gatos… con trasportín.

Coloca a tu nuevo gato en una jaula y colócala en un lugar de la casa fuera de la habitación segura (por ejemplo, la sala de estaro la terraza). Permite que los gatos se miren entre sí y se huelan a través de la puerta del trasportín.

¿Alguna señal de agresión? Si observas alguna, haz que la visita sea breve y devuelve al gato nuevo a su habitación segura.

Repite esta fase de dos a tres veces al día (si es posible), hasta que los gatos parezcan estar más cómodos entre sí. El tiempo lo cura todo.

✔ Cuarta Etapa – Los gatos se encuentran

Deja que los gatos se encuentren y se conozcan a su propio ritmo. Si no hay signos de agresión entre gatos, deje la puerta de la habitación segura abierta un poco. Esto permitirá que el nuevo gato explore o que el gato residente lo visite. La supervisión es necesaria para la seguridad de ambos gatos y para tu tranquilidad.

En caso de agresión, ten a mano una botella de spray llena de agua o una toalla, para eludir el encuentro indeseado. Siempre detén las posibles amenazas y, máxime si se trata de agresiones serias, hay que hacerlo de inmediato, ya que una pelea  puede dañar el potencial para una integración y relación exitosa, además de pasar un rato pésimo.

Si durante un período de dos o tres semanas el plan de integración no funciona, considera la instalación de una puerta mosquitera económica en una tienda de suministros de construcción. La puerta mosquitera permite que los gatos continúen conociéndose, a través de su vista y olfato, manteniendo a ambas partes ‘seguras’. Cada gato puede turnarse en la habitación con mosquitero para que sepan que el territorio es compartido.

Un difusor de feromonas para atemperar los ánimos también puede resultar útil cuando la integración es difícil. Consigue uno de gran capacidad y ármate de paciencia.

Los gatos son jerárquicos por naturaleza y deben establecer y afirmar el orden jerárquico dentro de su hogar

✔ Quinta Etapa – La integración completa

Si puedes notar algunos silbidos ocasionales, golpes y un comportamiento gruñón durante las siguientes semanas. Bueno, esto entra dentro de lo normal. Los gatos son jerárquicos por naturaleza y deben establecer y afirmar el orden jerárquico dentro de su hogar. Además, al igual que los humanos, todos los gatos tienen unos días buenos y otros… no tanto.

Ten en cuenta que estas etapas detalladas anteriormente solo ofrecen líneas de tiempo aproximadas. Algunas integraciones pueden ser más rápidas o más lentas y su éxito depende de las personalidades de los gatos involucrados en la nueva convivencia.

Recuerda y observa, y ten paciencia. Finalmente, tú vas a ser quien mejor conozca a tus felinos. Usa la lógica y el sentido común y, de nuevo, cárgate de paciencia al integrar un gato o gatos nuevos. Merece la pena.

Cómo presentar a un compañero gato tímido: la excepción a la regla

Si has adoptado un gato o un gatito tímido para brindarle compañía a su gato residente, una integración más rápida puede ser lo mejor. Los gatos tímidos a menudo están acostumbrados y son bienvenidos para la compañía de otros felinos. Se sentirán muy solos por sí mismos, por lo que es recomendable que la integración se realice muy rápidamente (de uno a tres días) a menos que haya otros problemas importantes.

Cómo presentar gatos a perros

▷ Fase 1 – El gato huele al perrito

En este caso, es una buena idea seguir los mismos pasos detallados en la Etapa 1 de la sección ‘Cómo presentar un gatos a los otros gatos’.

▷ Fase 2 – Cambiar puntos de vista

Si no hay otros gatos en tu hogar, confina al perro a una habitación y deja que el gato comience a explorar el resto de su casa durante una o dos horas cada día hasta que el gato se familiarice y se sienta cómodo con el diseño del hogar.

▷ Fase 3 – El gato se encuentra con el perro

Lleva al perro con una correa. Una vez que el gato se acostumbre a tu casa, déjalo vagar y curiosear suelto en una habitación. Mantén al perro con correa y ten a mano alguna golosina para perros. Si es posible, ten a otra persona con la que el gato esté familiarizado en el otro lado de la habitación para tranquilizar y distraer al gato del perro.

Siéntate y conoce. Mantén al perro sentado y concentrado en ti como líder. Intenta ofrecerle un juguete al perro. Si el perro se concentra en el juguete o lo acepta, recompénsalo con una golosina. Si el perro intenta pararse y moverse hacia el gato, corrígelo ligeramente con la correa y recompénsalo con una golosina. Si en algún momento el perro no responde a sus órdenes o si el nivel de estrés del gato parece elevado, saque al perro de la habitación. Sigue repitiendo este proceso hasta que el perro le responda e ignore o acepte al gato. Este proceso ayuda a enseñarle al perro que los gatos no son una presa, juguetes para perseguir o amenazas.

Nunca dejes al perro y al gato sin supervisión hasta que estés absolutamente seguro de que han establecido una relación mutua, de confianza y de respeto.

Asegúrate de que tu gatito tenga algo de espacio para estar a solas. Incluso una vez que el (los) gato (s) y el (los) perro (s) se sientan cómodos entre sí, a los gatos todavía les gusta tener la opción de retirarse a un lugar alejado del perro.

Coloca una puerta para bebés, o algo similar, en la entrada de una habitación de la casa donde el gato o los gatos les gusta pasar el rato, o compra o construye una torre alta para gatos para que puedan retirarse cuando sea necesario.

▷ Nota: El tiempo necesario para integrar con éxito a los gatos con los perros varía según las experiencias previas de los animales involucrados. Por ejemplo, tu perro puede haber tenido un encuentro previo con un gato o el gato puede haber tenido experiencia previa con un perro. A menudo, cuando los gatos y los perros están acostumbrados a estar cerca de otras especies, la integración puede ser más rápida.

✅ Consejos para niños

¡Hola! Soy tu nuevo gato y me gustaría contarte algunas cosas… Así comenzaba estas palabras y así quisiera concluirlas. Se trata de un mensaje agradable dirigido a los más pequeños de la casa para ayudar a presentar a tu (su) (vuestro) nuevo gato. Los niños y las niñas son inquietos por naturaleza ¡Como los gatos! Por eso, querrán jugar con ellos sin parar. 

Tampoco es una gran idea que se regalen todo el amor los primeros días de convivencia, habrá tiempo y será más satisfactorio si se hacen las cosas con calma, sentido, sentimiento e inteligencia:

Una idea para favorecer esta nueva conexión es escribir este pequeño decálogo para que sean conscientes de la situación, ganen en madurez y todo salga como debe. Estos serían algunos consejillos. Seguramente a ti se te ocurra alguno más. Cuando puedas, compártelos con todos nosotros…

Lo que (podría) decir el gatito a tus hijos…

• Tu casa es nueva para mí, así que estoy un poco nervioso/a y tengo algo de timidez todavía.
• Me tomará unos días sentirme cómodo/a, así es que ten paciencia. Pronto jugaremos juntos todo el rato.
• Por favor no me persigas; empezaré a jugar cuando me sienta más cómodo. Será pronto.
• Aprenderé sobre mi nueva casa oliendo todo, hasta el último rincón. Sí, tu habitación también.
• Como soy nuevo/a, podría huir de las voces fuertes, los ruidos y los movimientos rápidos. No te asustes, aunque yo a lo mejor sí lo haga.
• Como estoy un poco nervioso/a, podría sisear; así es como digo, «tengo miedo».
• Necesito momentos tranquilos como tú, así podría encontrar un escondite y echarme una buena siesta.
• Por favor, pon mi caja de arena en un lugar tranquilo y déjame usarla solo. Gracias.

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